Sigo creyendo que regalarle a un niño o niña un juguete que le permita construir casi cualquier cosa que su imaginación le pida es un acierto. Podrán estar hoy rodeados (y saturados) de aparatos “smart”, Peppa Pigs y todo tipo de juego virtual pero estoy seguro de que un set de construcción les llamará la atención y estimulará su creatividad tanto como me la estimulaba a mí en los 90, cuando el boom del ordenador, sus juegos y, luego, el internet (y el infinito) llegaron a casa y, aun con tanta novedad, encontraba yo momentos de placer jugando con bloques de construcción. En efecto, yo creo que si en casa soy el manitas es porque jugué con esta clase de cosas de niño! En ese sentido, la única pega que le encuentro a este producto—razón por la cual no le puedo poner 4/5⭐️—es que ya vienen armados! Eso como que arruina el propósito, no? Lo emocionante de los bloques de construcción es ir siguiendo las instrucciones e ir viendo cómo va apareciendo lo que sale en la imagen pero hecho por tus propias mano! Sí, sigue habiendo el gozo secundario de luego desarmar los bloques y comenzar a armar lo que a ti te venga en gana pero me desilusiona bastante haberlos recibido y ver que en el empaque ya está todo armado, como si fuera un juguete común y corriente… En fin, aparte de eso, estos son bloques de construcción perfectamente compatibles con los Lego originales y, entonces, también con toda otra marca de terceros compatible con aquella (como los Mega Construx, claro, que son de Mattel también, como estos Magnext). De modo que tiene infinitas capacidades de expansión. Lo novedoso de esta propuesta, algo que nunca he visto en los Lego originales, es que parte de la construcción se hace con imanes. Esto te permite construir de una manera que al menos yo nunca antes había visto en los Lego: y es una manera 3D sin tener que armarla por capas con los bloques en sí… es decir, no es una construcción de una caja como se haría en el juego Minecraft, sino como la construiríamos en la vida real. Vienen 7 bloques especiales con potentes imanes de neodimio incorporados. Dichos bloques también aceptan que les coloques otros bloques encima pero, al mismo tiempo, pueden ser juntados entre sí con la ayuda de las 6 pelotitas de acero que vienen. De ese modo, los bloques no necesitan ir uno encima del otro para formar un la “estrella” (como la llaman en el empaque), sino que pueden ir con sus “partes positivas” para afuera y sus “negativas” para adentro, mirándose entre sí, formando efectivamente una forma tridimensional. Desde luego que esto expande las posibilidades de construcción y, así, la diversión. La calidad es la que uno se espera de Mattel, la marca “madre” de este producto. La diferencia entre estos bloques y los Lego originales, por ejemplo, es muy poca. De modo que uno puede estar seguro de estar obteniendo la mejor calidad por un muy buen precio. Obviamente se puede construir cualquier cosa que se quiera pero el kit viene ya armado en una “estrella”, como mencioné. Una de las características divertidas de la “estrella” es que puede pender de una de las pelotitas metálicas (por la transmisión de la fuerza de atracción de los imanes) de otra pelotita y se puede hacerlo girar sobre su eje, como un trompo. Dicho todo esto, lo que no me ha convencido mucho darle a un niño son esas pelotitas de acero que vienen en el kit. Son 6, como dije, y tienen un Ø de 15 mm. El producto dice que no es apto para edades 0-3 pero sinceramente puedo imaginarme a un niño de 4+ poniéndose una en la boca y tragándosela de casualidad o, peor, que se le quede atorada en la garganta, impidiéndole que respire… Sé que estoy tal vez siendo algo paranoico pero es que fue lo primero que se me vino a la menta cuando las vi. A pesar de que me lo pedí para jugar yo con él, este es un juguete para niños pequeños y los niños pequeños no son muy juiciosos con estas cosas. He visto niños que con 5-6 años se han metido cosas en la nariz que luego un padre ha tenido que extirpar con pinzas! En todo caso, yo preferiría regalárselo a un niño aclarándole al padre que viene con las pelotitas en cuestión y que, entonces, supervise el juego, al menos al principio, explicándole al niño que debe tener cuidado con esas pelotitas especialmente.